El cardo mariano es una planta medicinal valiosa por sus efectos en las funciones del hígado. Debe saberse que solo se utilizan las semillas de esta planta. Las semillas de cardo mariano son ricas en silimarina, con un efecto protector sobre el hígado y la vesícula biliar.
Estudios realizados en Alemania, Estados Unidos, Italia y Austria han demostrado que el cardo mariano es actualmente uno de los remedios naturales más potentes contra las afecciones hepáticas. Además, el cardo mariano es un antitóxico formidable que ayuda al organismo a resistir a los venenos más potentes, desde hongos tóxicos hasta gases industriales o metales pesados.
¿Cuáles son los beneficios del consumo de cardo mariano?
- Protege el hígado de la acción destructiva de toxinas fuertes y del alcohol.
- Aumenta los fenómenos de regeneración del tejido hepático, siendo un potente antioxidante.
- Estimula la regeneración del hígado en casos de hepatitis viral A, B y C, hepatitis tóxica o cirrosis hepática, y ha demostrado tener efectos de inhibición de la replicación de los virus hepáticos.
- Se utiliza como adyuvante en casos de disquinesia biliar, migrañas, urticaria, psoriasis o cáncer de piel.
- Reduce los niveles elevados de colesterol en sangre.
- Reduce la resistencia a la insulina de las células en pacientes con diabetes tipo 2.
- Inhibe el crecimiento de células tumorales en el cuello uterino y la próstata, en experimentos in vitro.
- Reduce los efectos secundarios negativos de la quimioterapia, utilizándose como un potente desintoxicante.
Modo de administración de cardo mariano:
-Té de cardo mariano:
Una cucharadita de semillas de cardo mariano trituradas se coloca en una taza con agua hirviendo, se hierve, se deja hervir una vez, luego se cuela y se beben 2 tazas al día repartidas en 3 porciones antes de cada comida. Quienes no toleren el sabor amargo del té de cardo mariano pueden usar una cucharadita de menta junto con un poco de miel.
Según la opinión de los investigadores estadounidenses, la mejor manera de evitar que los flavonoides de su composición se degraden al contacto con agua hirviendo es la siguiente:
Infusión combinada que se prepara de la siguiente manera:
1-2 cucharaditas de polvo de semillas de cardo mariano se dejan en remojo en media taza de agua desde la noche hasta la mañana, cuando se filtra; se reserva la maceración, y el polvo restante se infunde con media taza de agua caliente durante 20 minutos, luego se enfría; se combinan ambos extractos; se bebe esta preparación media hora antes de las comidas. Dosis: 3 tazas al día.
-Tintura de cardo mariano:
Es probablemente la forma de administración ideal, ya que este preparado se puede conservar durante 2 años sin perder sus propiedades terapéuticas.
Se prepara de la siguiente manera: se colocan 20 cucharadas de polvo de semillas de cardo mariano en un frasco, se cubren con alcohol alimentario de 50 grados, mezclando continuamente. Cuando toda la masa de polvo ha sido cubierta, quedando encima una capa de alcohol de 2 dedos, se cierra el frasco herméticamente y se deja macerar durante 14 días, luego se filtra. El extracto obtenido se coloca en pequeñas botellas oscuras y generalmente se administra una cucharadita 4 veces al día.
*Este artículo es solo informativo. Para un diagnóstico preciso, se recomienda consultar a un médico especialista.
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