En la búsqueda de alternativas naturales y saludables a los productos comerciales de cuidado personal, cada vez más personas recurren a recetas caseras para crear sus propios productos, evitando así los químicos y aditivos sintéticos. Uno de esos productos que puedes preparar fácilmente en tu propia cocina es el desodorante probiótico, que no solo te mantendrá fresco y sin olor durante todo el día, sino que también cuidará la delicada piel de las axilas. Aquí te mostramos cómo puedes preparar desodorante probiótico casero utilizando ingredientes naturales y aceites esenciales:
Según las investigaciones, los probióticos se utilizan en productos de belleza, como el desodorante, para „equilibrar” el microbioma de la piel, mejorar la barrera cutánea y el aspecto general de la piel, y también tienen efectos desodorizantes. Por lo tanto, al combinarlo con otros ingredientes naturales, obtienes una manera verdaderamente segura y efectiva de mantener alejado el olor corporal desagradable.
Desodorante probiótico casero – Receta
Ingredientes:
¼ de taza de bicarbonato de sodio
¼ de taza de aceite de coco
¼ de taza de cera de abejas
¼ de taza de manteca de karité
3 cucharadas de polvo de arrurruz (tapioca)
Contenido de 3 cápsulas de probióticos (sin prebióticos)
10 gotas de aceite esencial de árbol de té
10 gotas de aceite esencial de lavanda, cítricos, ciprés o bergamota (elige uno o una combinación que te guste)
Instrucciones:
En un recipiente resistente al calor, combina el bicarbonato de sodio, el aceite de coco, la cera de abejas y la manteca de karité. Luego, coloca el recipiente a baño María, mezclando constantemente, hasta que todos los ingredientes se derritan y se mezclen bien.
Una vez que la mezcla esté completamente homogénea, retírala del fuego y deja que se enfríe un poco.
Agrega el polvo de arrurruz y las cápsulas de probióticos, abriéndolas y mezclándolas bien en la composición.
Añade los aceites esenciales y mezcla bien para distribuirlos uniformemente en la composición.
Vierte la mezcla en recipientes de desodorante limpios y secos y deja que se solidifique a temperatura ambiente o en el refrigerador.
Una vez que se haya solidificado, ¡el desodorante probiótico casero está listo para usar! Aplícalo en la piel limpia y seca de las axilas todas las mañanas o cuando lo necesites.
Cómo funciona:
El bicarbonato de sodio ayuda a neutralizar los olores desagradables, el aceite de coco y la manteca de karité hidratan y nutren la piel, el polvo de arrurruz tiene un papel de absorción de la humedad, y los probióticos ayudan a mantener un equilibrio saludable de la flora bacteriana, reduciendo así el riesgo de olores desagradables.
Con esta receta simple y efectiva, puedes tener siempre a mano un desodorante natural y eficaz que te brinde frescura y protección durante todo el día.
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