Tintura de lavanda. Originaria de la zona mediterránea, la lavanda crece hoy en día de forma espontánea o se cultiva en extensas áreas, para ser aprovechada en la industria cosmética y más allá.
En la terapia médica, la lavanda tiene muchas aplicaciones, tanto el aceite esencial como las flores secas, procesadas en infusiones, tinturas, aceites, inhalaciones y baños generales. Debes saber que, entre todos los productos vegetales administrados por vía oral, las tinturas son las más fácilmente asimiladas por el organismo, con efectos que se presentan en poco tiempo.
La tintura de lavanda tiene propiedades ansiolíticas, sedantes, hipnóticas, antidepresivas, espasmolíticas, analgésicas, hipotensivas, coleréticas, diuréticas, antimicrobianas, antifúngicas, antitumorales y cicatrizantes.
A continuación, te explicamos cómo preparar la tintura de lavanda:
Para preparar la tintura, necesitarás 10 g de flores secas de lavanda y 100 ml de alcohol alimentario o algún otro producto destilado. En un frasco, se añaden las flores y el alcohol, y se deja macerar durante 10 días, agitándolo varias veces al día. Al final, se filtra a través de una gasa y se deja decantar en el refrigerador durante 6 días, para una completa clarificación. Se transfiere suavemente la parte clara a otro frasco, eliminando cualquier residuo que se haya depositado en el fondo del recipiente. Se guarda en botellas oscuras con tapón cuentagotas. Este preparado tiene una validez de 2 años a partir de la fecha de preparación.
Aquí tienes en qué afecciones se recomienda la tintura de lavanda:
-La aplicación de la tintura de lavanda en forma de compresas, con un masaje suave en el pecho, así como las inhalaciones con vapores de infusión, dan buenos resultados en enfermedades agudas de los pulmones (neumonía, pleuresía, congestión pulmonar, angina y gripe). Las inhalaciones se realizan con 20 gotas de tintura añadidas a una infusión de yemas de álamo, manzanilla o yemas de pino. También se puede consumir internamente, 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de tilo.
-La tintura de lavanda es eficaz también en el caso de pieles secas y sensibles. Se pueden hacer tampones con algodón, por la mañana y por la noche, con tintura de lavanda en glicerina.
-Para la caída del cabello y en casos de caspa, se fricciona el cuero cabelludo con tintura de lavanda combinada con tintura de tomillo y romero.
-La tintura de lavanda se puede utilizar en áreas dolorosas en caso de contusiones, luxaciones, hinchazones, moretones, golpes en los tendones, gota, neuralgias o reumatismo, en forma de compresas. Además, las quemaduras o las irritaciones se tratarán fácilmente con este tipo de tintura de lavanda, al igual que las contusiones, las heridas abiertas o los furúnculos. La administración de lavanda se realiza según la gravedad de la afección que padezca. Se pueden administrar hasta 10 gotas o incluso 3 cucharaditas de tintura de lavanda al día durante 30 días.
-La tintura de lavanda se utiliza como coadyuvante en casos de enfermedades del aparato digestivo (gastritis, úlcera gástrica, cólicos, meteorismo, flatulencia, hinchazón y estados espásticos del aparato digestivo, diarrea). Se administra 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de caléndula.
-La tintura de lavanda se utiliza como coadyuvante en casos de anemia (falta de apetito): se administra 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de ajenjo o achicoria, después de las comidas.
-La tintura de lavanda se recomienda también en enfermedades del sistema urogenital (cistitis, pielitis, metrorragias). Se administra 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de caléndula.
-La tintura de lavanda combate el insomnio, el estrés, la depresión y los dolores de cabeza, siendo recomendada en enfermedades del sistema nervioso central. Se administra 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de tilo. También se recomiendan los baños relajantes. Estos se logran añadiendo a la bañera con agua caliente 20 gotas de aceite esencial o una cucharadita de tintura de lavanda.
-La tintura de lavanda es eficaz en el caso de parasitosis intestinales, como vermífugo. Se utilizan 30 gotas de la tintura, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de espino albar.
-En el caso de enfermedades cardiovasculares (hipertensión, neurosis cardíaca), la tintura de lavanda es muy eficaz. Se utiliza la tintura de lavanda, 30 gotas, 3 veces al día, añadidas a una taza de té de ginkgo biloba o saúco.
Contraindicaciones y precauciones
Debido al contenido de alcohol, no se recomienda la administración en casos de: hepatitis viral, tóxica y metabólica, esteatosis hepática, cirrosis hepática, embarazo y lactancia. Se administra con precaución en personas con gastritis hiperácida y úlcera gástrica y duodenal (debido al contenido de alcohol, puede aumentar la acidez gástrica).”
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